Si la compra de una vivienda es probablemente la mayor inversión de nuestra vida, amueblarla también supone un susto para el bolsillo, y por eso dedicamos el post de hoy a diversos trucos y estrategias para hacerte con muebles baratos, o, al menos, a un menor precio del habitual.
Eso sí, antes de empezar, es importante recalcar que, a veces, lo barato sale caro, por lo que la idea no es adquirir muebles batatos “per se” pero de mala calidad (a menos que te compense cambiarlos cada cierto tiempo) sino adquirir buscar soluciones que no la comprometan o adquirir muebles de cierto nivel a menor precio.
¡Vamos con ello!
1. Aprovecha las rebajas, liquidaciones y días señalados
Los periodos de rebajas, así como determinados días señalados en el calendario, como el Black Friday 2024, el día del Single o el CyberMonday, son fechas perfectas para adquirir esos muebles que te gustan con importantes descuentos.
También los cambios de temporada o las liquidaciones por cierre, son una gran oportunidad para encontrar mobiliario y complementos a precios reducidos, pues muchas tiendas ofrecen descuentos significativos para deshacerse de su stock.
Ten en cuenta además, que durante el año, las tiendas suelen tener sus propios “días especiales” fuera de los habituales del calendario. Por ejemplo, “el mes del sofá”, “la semana sin IVA”, etc.
El truco por tanto está en seleccionar los muebles adecuados y armarse de paciencia hasta que surja el momento. Recuerda: ¡las prisas son malas consejeras!
2. Investiga y compara precios
Antes de comprar, hay que planificar y no dejarse llevar por el momento.
Una vez selecciones los muebles que quieres, investiga tanto en tiendas físicas como online para comparar precios.
De hecho, al igual que ocurre con los seguros, puedes utilizar comparadores de precios para asegurarte de que obtienes la mejor oferta.
Eso sí, ten en cuenta que como las tiendas online tienen menos costes que las físicas (dado que no tienen que pagar por grandes locales) encontrarás mejores ofertas, pero tendrás más problemas a la hora de gestionar incidencias que con alguien a quien puedes poner cara.
3. Opta por muebles de segunda mano
El mercado de segunda mano es una opción perfecta para conseguir muebles baratos de calidad, especialmente si buscas piezas únicas o vintage.
Puedes explorar en mercadillos, pop-ups, tiendas de segunda mano o las clásicas plataformas de compraventa online entre particulares.
Con un poco de creatividad, puedes restaurar esos muebles antiguos que adquieras y darles un nuevo aspecto, consiguiendo además un diseño interior de lo más original.
4. Considera muebles de exposición
Muchas tiendas venden los muebles que han estado un tiempo en exposición en su showroom de ventas a precios reducidos.
Estos muebles suelen estar en buen estado y pueden incluir descuentos importantes, pues la tienda ha amortizado ya su coste y además, vendiéndolo, se ahorra el coste de darlo de baja, sacarlo de la tienda o guardarlo en almacén.
5. Personaliza muebles básicos
Si tienes un presupuesto limitado, considera comprar muebles baratos de calidad básica en grandes almacenes o macrotiendas de decoración y personalízalos según tus gustos añadiéndoles detalles de más nivel.
Pintarlos, añadir tiradores nuevos o cambiar tapicerías puede transformar una pieza sencilla en algo único y hacer que parezcan mejores o más caras de lo que en realidad son.
6. Participa en subastas o ventas por cierres de hoteles
Las subastas y ventas por cierres de hoteles son una mina de oro para encontrar muebles de calidad a bajo precio.
Estos eventos suelen incluir muebles de alta calidad en perfectas condiciones a precios muy competitivos, pues suelen tener prisa en cerrar las ventas.
Además, en muchos casos venden “por lotes” añadiendo descuentos adicionales. ¡Tenlos siempre en el radar!
7. Busca opciones DIY (Hazlo tú mismo)
Crear tus propios muebles puede ser más económico y satisfactorio que comprarlos y es una de las mejores opciones para conseguir muebles baratos (básicamente el coste de los materiales).
Si no sabes cómo hacerlos, existen en la red cientos de tutoriales online para construir desde estanterías hasta mesas con materiales reciclados, como pallets o cajas de madera.
Observa también las zonas donde se vayan a hacer obras, pues antes de empezar deben vaciar el piso y muchos dejan los muebles antiguos en la calle a la espera de ser recogidos por el ayuntamiento.
¡Tampoco pierdas de vista los contenedores de obra! A veces por ahí se encuentran auténticas joyas que los vecinos sueltan ahí aprovechando que tienen que sustituir alguno.
8. Negocia el precio
En muchos casos, especialmente en tiendas de segunda mano o mercados locales, pero también en tiendas de mobiliario de alto nivel puedes negociar el precio.
Ten en cuenta que los comerciales tienen margen para aplicar algún que otro descuento, así que pídelo porque el no ya lo tienes.
Eso sí, sé firme al regatear, pero también amable. De ese modo podrías obtener un mejor trato.
9. Elige muebles multifuncionales
Invertir en muebles multifuncionales puede resultar más económico a largo plazo.
Por ejemplo, un sofá cama, una mesa extensible o una mesa auxiliar tipo puff te permiten ahorrar espacio y/o dinero al cumplir varias funciones.
Digamos que pueden no parecer muebles baratos al principio, pero si uno cuenta lo que se ahorra en comprar dos piezas por separado notará la diferencia.
10. Infórmate sobre marcas y materiales
Conocer las marcas y los materiales te ayudará a valorar si un mueble realmente vale su precio.
A veces, pagar un poco más por un material duradero puede ser más rentable que comprar algo muy barato pero de mala calidad.
Y uno de propina… ¡Sal de la ciudad!
Si vives en una gran ciudad y eres de los que prefiere ver los muebles en vivo para seleccionarlos, intenta salir un poco de tu radio de acción.
Las tiendas de las afueras o de localidades pequeñas y cercanas suelen tener menores costes de alquileres y personal, y por tanto puedes encontrar muebles baratos en grandes naves con más facilidad que en tiendas de la urbe donde el coste de alquiler es carísimo.
Eso sí, valora también tu tiempo. Si tienes poco o desplazarte es complicado, puede resultar un coste añadido que tendrás que valorar.
En rEn resumen, comprar muebles baratos no significa sacrificar calidad o estilo.
Con paciencia, investigación y un poco de creatividad, puedes encontrar piezas que se ajusten a tu presupuesto y a la ve mejoren la estética de tu hogar.
Y recuerda: el mueble más barato es aquél que sale gratis. Así que antes de comprar, pregunta a tus familiares, vecinos o conocidos si les sobra alguno, ¡igual te sorprenden!