Las alfombras son un recurso estupendo para decorar salones o dormitorios sin gastarse mucho dinero (aunque todo depende de la alfombra, claro está), ya que nos permiten elegir un diseño impactante y ocupan tanta superficie que podremos perfectamente crear el foco de la estancia en ellas sin preocuparnos de mucho más.
Aunque durante mucho tiempo han sido algo denostadas, principalmente porque solían asociarse a las clásicas alfombras persas con diseños algo antiguos, en la actualidad hay tantas alfombras modernas y originales que sólo con ellas podríamos decorar la casa si quisiéramos.
De hecho, hoy en día suelen emplearse mucho las alfombras vinílicas o sintéticas, tanto por su facilidad de limpieza (como la poliamida por ejemplo), como por su precio (obviamente son mucho más económicas que las naturales).
Por otro lado, como complemento decorativo, la alfombra permite además enmarcar zonas distintas en un mismo ambiente si la estancia es muy grande.
Por ejemplo, en el salón, nos permitirá encuadrar la zona de estar para integrar bajo el mismo suelo sofás, sillones y puffs; o bien crear un rincón de lectura o delimitar la zona de comedor.
Hay que tener en cuenta que si se pone en el comedor, deberá ser muy fina para que las sillas no se tropiecen con ella ni “cojeen” cuando las movamos y deberá estar hecha de un material fácilmente limpiable, pues más de una vez se nos caerán migas o alguna copa que podría arruinarnos la cena…
En el dormitorio, las alfombras suelen utilizarse para enmarcar la zona de cama, bien con una gran alfombra que sobresalga claramente a ambos lados y a los pies de la cama, o bien eligiendo dos alfombras alargadas y estrechas para colocar a cada lado de la cama, centrándola con las mesillas.
También es posible poner alguna en la entrada, fundamentalmente de tipo esterilla o plana, por un lado para decorar ese área (normalmente vacía en la zona de paso, pues está concebida para entrar y salir) y por otro para terminar de eliminar los restos de los zapatos cuando venimos de la calle y no ensuciar el suelo del salón.
A veces su utilizan también en cocinas, sobre todo cuando se utiliza el mismo suelo de la casa para este área y conviene protegerlo. En este caso valen los mismos consejos que para el comedor: plana y de fácil limpieza.
En cuanto a diseños y formas de alfombras modernas, los hay en todos los estilos: redondas, cuadradas, rectangulares, irregulares, continuas o en losetas, finas o gruesas, pasilleras…
Por supuesto las puedes pedir a medida, ya sea con unas dimensiones particulares o estableciendo tu propio diseño.
En cuanto a materiales, si eliges una alfombra de pelo conseguirás calidez; si la colocas de cuero, carácter y elegancia y si le pones una nota de color, transmitirás alegría y positividad.
Hoy en día suelen emplearse mucho las alfombras sintéticas, tanto por su facilidad de limpieza (como la poliamida por ejemplo), como por su precio (obviamente son mucho más económicas que las naturales).
Y para terminar, un tip decorativo: Si eliges una alfombra muy colorida o con un diseño muy rotundo, te recomendamos que pongas los muebles lo más neutros posible y que no recargues la decoración de la estancia con muchos cuadros u otros complementos.
¡¡Deja que la vista se vaya al suelo!!
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Mientras tanto, te dejamos con algunas otras imágenes de alfombras modernas para tu inspiración.
Vía: pinterest.com