Hoy os mostramos un apartamento en Barcelona premiado con el prestigioso galardón al mejor diseño interior del año 2013 en el INSIDE FESTIVAL OF INTERIORS, que tuvo lugar este otoño en Singapur.
El apartamento en sí tiene el nombre de la calle donde se ubica, Carrer Avinyó, y salió designado de una lista de 55 nominados que incluían proyectos de diseñadores o estudios tan reputados como Zaha Hadid Architects y Hassel.
El apartamento, diseñado y reestructurado por el estudio David Kohn Architects es, según el propio David Kohn “un homenaje a Barcelona”. Situado en el barrio gótico de la Ciutat Vella (la parte antigua de la ciudad), se mimetiza perfectamente con el ambiente y la atmósfera de sus calles.
Con una planta curiosa e inusual en forma de L picuda, el apartamento se distribuye en dos plantas que albergan un salón-cocina-comedor abierto, un baño y 3 dormitorios. El diseño refleja una mezcla de espacios abiertos pero a la vez privados, ya que el encargo provenía de dos hermanos que actualmente viven y trabajan en el extranjero pero que deseaban una segunda vivienda próxima a sus raíces. Por tanto, debía guardarse un correcto equilibrio entre los espacios compartidos y los que requieren más intimidad.
Una planta por otro lado complicada de distribuir (normalmente dividida en pequeños compartimentos a lo largo de un pasillo en el resto del inmueble) que en este caso se solucionó dejando toda la zona central abierta. Aprovechando los techos especialmente altos, se optó por crear una segunda planta con dos alas separadas conectadas entre sí por una pasarela que rodea todo el muro interior y que hace las veces de biblioteca, uniendo de esta forma el baño con los dormitorios.
Si hubiera que elegir un elemento en el que recayera el foco del proyecto, probablemente elegiríamos el suelo cerámico. Compuesto por pequeñas baldosas en forma de triángulos equiláteros exactos de diversos colores, inspirados en la propia planta del inmueble, encajan unos en otros como si de un puzle perfecto se tratara.
La biblioteca suspendida por su parte deja libre el espacio interior, lo que unido a la supresión de otros elementos tradicionales y a la inserción de algunos nuevos como la escalera de madera que sube por la cocina, el cubículo de la habitación de invitados o el marco metálico y geométrico con el que se ha cubierto la entrada, le dan un aire Art Decò a este apartamento en Barcelona muy en consonancia con el entorno.
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