Los japoneses, aparte de por el sushi, su sonrisa permanente y la cámara de fotos siempre colgada al hombro, son sobradamente conocidos por su exquisita elegancia en el diseño. Nos lo demuestran constantemente en la arquitectura, en diseño de interiores, en mobiliario o en accesorios de decoración… Hoy en Decofilia queremos centrarnos precisamente en un complemento decorativo que plasma como ninguno esa elegancia: los paneles japoneses.
Estos paneles son un tipo de textiles para ventanas y ventanales que evocan a los shōji (障子), las clásicas puertas correderas de papel washi traslúcido con cuarterones de madera clara típicas de las viviendas japonesas. Sus distintas texturas hacen que podamos jugar con opacidades y claros según su disposición, ya que funcionan a través de un sistema de raíles superiores (normalmente de 3 a 5 carriles), por los que discurren los paneles superponiéndose unos con otros. Y es que los japoneses siempre fueron pioneros en el juegos de luces y sombras (para los que os interese este tema os recomendamos el libro del “El elogio de la sombra” de Tanizaki).
Estos paneles pueden ir de suelo a techo o de techo o a media distancia, aunque los primeros son claramente más aconsejables a efectos estéticos, ya que crean una sensación de altura en aquellas estancias donde van colocados. Por otro lado, la medida más habitual para los paneles es de 50-60cm de ancho por 3 metros de altura, pero se pueden encargar a medida si deseas anchuras más grandes. Además, existen algunos modelos con raíles curvos por si no te gustan las líneas rectas a la hora de dividir espacios.
En cuanto al material, suelen quedar mejor los de textil rígido que los de tela demasiado ligera, tanto más cuanto más altos sean los paneles. Si la tela es muy ligera debería llevar un peso fuerte (normalmente una barra) en la zona inferior para que provoque la caída y mantenga rectos los paneles. A veces se colocan en los paneles pequeñas varillas intermedias que además de evocar a los cuadrantes de las puertas japonesas permiten distribuir el peso a lo largo de toda su superficie.
Los paneles pueden correr de un lado a otro de distintas formas: se pueden contratar sistemas motorizados para su movimiento a distancia, o bien correrlos de forma manual, bien con una especie de varilla o bastoncito enganchado a los raíles, o bien directamente deslizándolos con las manos. Esta opción es poco recomendable porque además de que con el tiempo puede acabar manchándose la zona por intermedia del panel (la que queda a la altura de nuestro brazo), especialmente en el caso de paneles blancos, también a veces si el material no es de muy buena calidad puede acabar cogiendo forma o despeluchándose por los lados.
En cuanto a colores, materiales y diseños, los podemos encontrar de todo tipo: planos, texturados, de mimbre, con dibujos, combinados en gamas de colores, degradados, sobrios y elegantes o alegres y divertidos, infantiles… Además, aunque las ventanas son su aplicación natural, quedan estupendos como separador de estancias multifuncionales. Por ejemplo, para el caso en que tengas la cocina unida con el salón y a diario te guste el espacio diáfano pero cuando venga una visita prefieras una división. También es una opción ideal para ahorrar dinero en vestidores o armarios cuando vamos justos de dinero, ya que puedes sustituir las puertas (generalmente lo más caro) por paneles y el ahorro será más que considerable.
El único “pero” que se les puede poner es que necesitan un espacio libre a los lados para poder recoger los paneles, por lo que si no tienes hueco junto a las ventanas, no conviene ponerlos porque de otro modo siempre te quedará una zona de la ventana cubierta por el panel. Aún así, podría seguir siendo una opción elegante y estupenda para otras estancias.
Os dejamos algunos ejemplos de ambientes decorados con paneles japoneses para vuestra inspiración.
Y si lo que buscas es saberlo todo sobre el estilo japonés y otros estilos, te encantará el curso de estilos decorativos que tenemos en nuestra Decolanzadera, en el que a través de una trilogía desgranamos hasta 45 estilos de decoración de interiores para que acabes siendo todo un experto por menos de lo que cuesta una cena 🙂
Vía: pinterest.com
Después de seguir tus ideas, me he puesto a buscar tiendas online, y una amiga me recomendó cortinarium, una tienda online donde te personalizan los paneles japoneses. Pedí una muestra gratis de telas, me las enviaron, hice mi pedido y en pocos días tenía mis estores personalizados. Gracias por ayudarme!
Buenos consejos para realizar una excelente decoración en casa al puro estilo japonés. Muy recomendable compañeras. Un saludo
Muchas gracias, nos alegra que te guste 😉