Hoy en nuestro blog de decoración queremos traeros una solución que hace ya unos años que se utiliza y sigue estando de moda para vestir las paredes, ya sea un solo paño, una estancia entera o toda la casa. Se trata del ladrillo visto.
Como hemos dicho, no es ninguna novedad que se utilice el ladrillo visto para decorar el interior de una casa. De hecho se trata de una moda bastante antigua, y es que viene desde los años 50.
Cada vez con más frecuencia podemos entrar en tiendas y locales donde han incorporado esta estética que deja al desnudo las paredes.
Los hay que mezclan estilos combinando la pureza del ladrillo con mobiliario y decoración más refinada y los hay que optan por un ambiente más vintage o industrial.
Es de esa época precisamente a la que pertenece esta tendencia decorativa. Se trataba de hacer habitable un espacio que en un principio no estaba diseñado para ser una vivienda.
Así con algunos toques se transformaba en un hogar acogedor, pero en los que se seguía viendo los elementos estructurales de la vivienda, es decir, la pared de ladrillos.
No había suficiente dinero y esta era la forma de ahorrar y aprovechar el espacio a partes iguales.
Este recurso también se ha introducido a la hora de decorar casas en la actualidad y ya podemos ver el ladrillo en salones, cocinas y dormitorios.
Viene especialmente bien para decorar paredes grandes en las que no sabemos qué poner: si las dejas de ladrillo no necesitarás poner nada más.
Lo puedes dejar al natural, enmarcando una porción de pared o pintarlo de un color a juego con el resto de la sala.
Como sugerencia, os recomendamos pintarlos de blanco: crearéis un contenedor neutro que combinará prácticamente con todos los estilos.
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Vía: pinterest.com