En nuestra apuesta constante por el diseño, hemos decidido abrir en nuestro blog de decoración una nueva sección: el diseño de stands. Tras numerosas visitas a diferentes ferias europeas a lo largo de nuestra carrera profesional, creemos que esta disciplina se merece un espacio aparte por su belleza, su estética y su tremenda influencia en la imagen de marca del exhibidor.
Cuando una empresa decide acudir a una feria, normalmente lo hace para dirigirse a un público profesional. Y si en general un diseño bonito atrae la atención del visitante y amplía el número de visitas, en el caso de las ferias relacionadas con la arquitectura o el interiorismo el cuidar el diseño es especialmente importante, dado que el público que acude a ellas presta una especial atención a estos detalles: arquitectos, diseñadores industriales, interioristas, proyectistas de iluminación… Todos suelen tener en común el diseño como su leit motiv y por tanto cuidar “el envoltorio” es tan importante como cuidar el producto que se lleva a feria.
Aunque obviamente cuantos más metros cuadrados tengamos disponibles más espectacularidad se puede conseguir, lo cierto es que como en el caso de las viviendas, lo importante no es el tamaño, sino la idea: de un sólo metro cuadrado se puede conseguir un gran diseño. En cualquier caso, en el diseño de stands, al igual que en el escaparatismo, lo más importante es que el stand atraiga pero no “fagocite” la imagen de marca o el producto expuesto: se debe hablar más de lo segundo que de lo primero.
A la hora de diseñar un stand puedes optar por distintos tipos:
Stand abierto
Es aquél que participa con el resto de la feria exponiendo de manera clara todos sus productos, sin entrada, de forma totalmente accesible al visitante. En este caso lo más importante es cuidar la calidad, cantidad y de elementos a exponer, ya que tienen que llamar la atención entre todo el resto de elementos feriales o de otros stands. En Decofilia te recomendamos la norma “menos es más”: escoge los productos más representativos y sitúalos de una manera muy original, sobre todo ilumínandolos muy bien.
Stand cerrado o interior
Desde fuera suelen verse sólo los costados (en ocasiones dejando entrever ligeramente el interior). Tienen como finalidad causar intriga en el visitante para que entre dentro del stand y es bueno que a lo largo de la fachada se vayan dando pistas hacia la zona de entrada o incluso acentuar de manera muy literal el producto que se vende en su interior. Aunque en todos los casos es importante, en este en particular se debe enfatizar especialmente el nombre de la empresa situándolo en los puntos de mayor visualización.
Stand semiabierto
Es una combinación de los dos anteriores y puede generar opciones curiosas, ya que uno parece introducirse en otra plataforma. En este tipo de stands se pueden distribuir las distintas zonas de varias maneras: o bien causando intriga con los elementos a exponer situándolos en las zonas interiores, mientras se deja la zonas de reuniones y de expositor en la parte exterior, o bien se deja la zona de exposición de productos de cara al público y se deja un sitio reservado para la atención al cliente en la zona interior, casi de forma privada.
En cualquiera de los casos, no hay que olvidar acompañar el stand con una buena imagen corporativa y un cuidado diseño grafico. Buenos catálogos, atractivos, muy bien explicados y con buen diseño; tarjetas de visita que animen a guardarla u obsequios o regalos corporativos muy cuidados para aquellos clientes potenciales que más nos interesen son cosas que contribuyen a crear imagen de marca. Todo ello claro sin olvidar el factor humano: la elección correcta del comercial que vaya a representar la empresa.
En fin, para abrir boca en esta sección, os mostramos una selección de 3 stands representativos de una de las grandes ferias de iluminación celebradas últimamente: Light & Building 2014 que cerró sus puertas el pasado mes de abril en Frankfurt, Alemania.
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Vía: pinterest.com
Un artículo muy interesante.
Estoy de acuerdo en que es muy importante que el stand tenga un diseño atrayente para el público profesional de la empresa. Así, muchos asistentes se acercarán a visitarlo.
De todos los stand nombrados es muy acertado el abierto, ya que es mucho más visible y los productos expuestos se podrán contemplar rápidamente.
Un saludo!
Noa alegra que te haya gustado 🙂