En un baño, tan importantes son los sanitarios como los accesorios, ya que éstos tienden a transformar el espacio, además de dotarlo de funcionalidad.
Por ello, es muy importante que sepamos elegir bien nuestros accesorios de baño y que éstos se elijan en línea con el diseño y el estilo de la estancia.
¿Cuáles son entonces los accesorios para baño imprescindibles?
Para hacer una buena clasificación de este tipo de accesorios, debemos basarnos en su funcionalidad, en el fin con el que han sido creados.
Siguiendo esta pauta podríamos decir que los accesorios indispensables en cualquier baño son los toalleros, portarrollos, escobillas, jaboneras y portacepillos. Y, en un segundo lugar, estanterías y perchas.
¡Veamos cada uno de ellos y las múltiples posibilidades que tienen!
Toalleros
Quizás el accesorio para baño más indispensable de todos sea el toallero. ¿Quién concibe hoy en día el baño de su vivienda sin toalla o dejarla en cualquier sitio?
Durante el día, lo que más hacemos al entrar al baño es lavarnos las manos, por lo que tendremos que disponer un buen sitio para colocar nuestra toalla, teniendo en cuenta que resulte cómodo y accesible.
Existen múltiples tipos de toalleros, entre los que destacan los lineales de barra (todo un clásico), que pueden ir a pared o en el mueble lavabo.
Si en cambio queremos darle un toque más original a nuestro baño, podemos optar por un toallero de pie.
Y si el problema es que tienes demasiadas toallas o no sabes muy bien dónde ubicar el toallero, podemos hacernos con los llamados toalleros de almacenaje, donde podemos ir guardando las toallas de toda la familia o algunas de reserva que aún no estemos utilizando.
Portarrollos
Normalmente el portarrollos está infravalorado y a veces no le damos la importancia que se merece.
De hecho, muchos baños directamente no disponen de este accesorio o no lo utilizan, dejando el rollo en cualquier parte (por ejemplo, sobre la cisterna del inodoro, un clásico).
No obstante, es una pieza a la que se le puede sacar mucho partido y que puede resultar muy decorativa.
Los portarrollos más básicos consisten en una barra que sujeta el rollo (con o sin cubierta para que el papel no se vea). Puramente funcional.
Para un aire más chic podemos elegirlos en tono negro, muy de moda en la grifería de baño, o con formas finas y sutiles.
Y si queremos darle un toque diferente, podemos jugar con ellos, convirtiendo la barra metálica en otro elemento, como cuerdas o madera.
Por su parte, los más atrevidos o guasones pueden optar por un diseño arriesgado, donde el soporte sea un elemento totalmente diferente fuera de contexto.
Escobillas
Las escobillas suelen ir o bien conjuntadas con el portarrollos (o al menos en armonía con él) o bien con los accesorios del lavabo.
Teniendo en cuenta esta premisa, lo más común es optar por escobillas de diseño minimalista (ya sea a suelo o colgadas de la pared), que son las más habituales.
Si en cambio nuestro baño es de estilo clásico, con su bañera exenta de formas orgánicas o su grifería color champán, deberemos optar por escobillas que no desentonen (normalmente con acabados dorados o en madera)
Por último, si ese es nuestro propósito, podemos también optar por un diseño arriesgado y divertido, especialmente indicados para baños infantiles.
Jaboneras
¿Jabón líquido o pastilla de jabón? Seas como seas hay solución para todos los gustos.
Estamos acostumbrados a que el plato de la pastilla de jabón esté sobre la encimera del lavabo, y esta es una solución muy habitual por funcional y práctica (el jabón nos queda muy a mano).
No obstante, si queremos que nuestro baño destaque, podemos optar jaboneras originales, como las que van sujetas a la pared.
Si nuestro baño va en estilo boho, también podemos optar por darle el toque en el material, ya sea con textura o color.
Si en cambio somos fans del jabón líquido, tenemos también opciones similares.
La más habitual, dejar el dispensador de jabón sobre la encimera del lavabo:
Si por el contrario queremos liberar espacio en la encimera, podemos poner la jabonera anclada en la pared (algunos de estos accesorios son adhesivos en caso de no querer taladrar, aunque no valen para todas las superficies y tienen que ser muy buenos para que no se despeguen con el tiempo).
Por último, según el estilo decorativo que tengamos en nuestro baño podremos optar por jaboneras de distintas formas (cuadradas, redondas o irregulares) o bien de distinto material: (plástico, cerámica, metal o cristal).
Portacepillos
Si la escobilla suele ir conjuntada con el portarrollos, desde luego el portacepillos tiene que ir sí o sí a juego con el dispensador de jabón, pues son dos elementos que siempre van juntos.
Si nuestro baño es contemporáneo, podemos optar por los portacepillos sencillos, donde prima más la función que la forma, ya sean cilíndricos o cúbicos.
Para añadirle un toque chic, podemos optar también por portacepillos que combinen dos materiales, uno de ellos metálico (en especial en tonos dorados o champán siguiendo la tendencia actual).
En cambio, si nuestro baño es más atrevido o, de nuevo, tenemos algún peque en casa con su propio baño, podemos optar por vasos portacepillos con forma animal.
Perchas
Aunque no son 100% imprescindibles, las perchas son el mejor modo de colgar una toalla de baño y las que mejor nos vienen al salir de la ducha.
Las perchas o ganchos son una solución muy práctica y que ocupa muy poquito espacio, ideal para baños pequeños, aunque a nivel estético tienen el inconveniente de que las toallas caen “arrugadas”, en lugar de bien dobladitas como en los toalleros de barra.
En cambio, son la solución perfecta (y la única también) cuando nos secamos con albornoz, ya que éstos no pueden colocarse en un toallero convencional (un tip estético para estos casos es colgarlo de una percha de armario que a su vez vaya colgada del gancho).
Estanterías
Tan importantes son todos los accesorios de baño como el orden que tengan. Y para ello las estanterías son la mejor forma de organizarlos.
Éstas nos ayudan a recoger, en muy poquito espacio, una gran cantidad de accesorios y elementos del baño.
Podemos colocarlas en todas las paredes del baño, ya sea fuera o dentro de la ducha, y si tenemos que reformar un baño y lo diseñamos antes de empezar la obra, podemos incluirlas en él mediante hornacinas.
Si en cambio esto no es posible, siempre podremos colocar nuestros estantes vistos a posteriori.
Como podemos ver, existen miles de tipos de accesorios de baño para conseguir un diseño adecuado a vuestro gusto.
Y por si hace falta un poquito más de inspiración, aquí dejamos algunos tips más para conseguir el baño perfecto con un par de detalles.
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Vía: pinterest.com