A lo largo de nuestra carrera profesional, nos hemos encontrado más de un motivo para decorar con flores y plantas artificiales.
Y sí, a nosotras al principio también nos parecía una idea poco factible por tratarse, precisamente, de un look artificial.
Pero lo cierto es que, con el paso de los años, cada vez es más fácil encontrar plantas que parecen auténticas.
Tanto que hasta hemos tenido que acercarnos y tocar o doblar las hojas para cerciorarnos de que no eran naturales.
En las ferias que visitamos, vemos proveedores tienen cada vez mejores productos, tanto de arreglos florales como de plantas de todos los tamaños, incluso pequeños arbolitos como olivos o árboles de laurel.
También lo vemos en los restaurantes (de esos que están proliferando con una decoración tan llamativa y apetecible), donde hay auténticas selvas en los rincones más oscuros y siempre, siempre, están verdes y frondosas.
Ahí también acabamos haciéndole más caso a las plantas que a la comida. Y, por supuesto, tocamos y nos vamos con una sonrisa por el acabado tan “natural” que han conseguido.
Pero lo cierto es que en un ambiente donde la distensión y el buen ánimo están asegurados, es más fácil que “cuele”, porque estamos predispuestos a pasarlo bien y percibimos el conjunto de la decoración como un entorno muy agradable. Ni se nos pasa por la cabeza que pueda haber algún elemento artificial.
Pero ¿qué ocurre cuando queremos hacer lo mismo en nuestra propia casa? Ahí no es tan sencillo hacer que pase desapercibida la vegetación.
Así que en este post te vamos a dar algunos trucos que te ayudarán en esta labor, para que tus flores y plantas artificiales parezcan naturales.
¿Cómo hacer que una planta pase por auténtica?
Adorna el macetero
Generalmente, nos van a vender las plantas artificiales con un tiesto más pequeño de lo que podría parecer que necesita el volumen total de dicha planta.
Y es que, al no ser natural, no necesita más de lo que trae, puesto que no tiene raíces que necesiten una buena maceta con tierra para expandirse y crecer.
Lo primero que se nos ocurre es ponerle un macetero o cesta más grande para que, de lejos, dé el pego. Sin embargo, a poco que nos acerquemos veremos que sobra hueco por todas partes, y que la cesta, si es blanda, tiende a caerse ya que no tiene cuerpo ni contenido que la mantenga.
Para estos casos tenemos que jugar con el trampantojo. Es decir, utilizar otros elementos que nos ayuden a dar por natural nuestra planta.
Lo primero será elevar un poco la planta. Para ello puedes utilizar una macera invertida dentro de la cesta o del macetero decorativo. Después rellenarás el hueco con papeles hasta llegar casi al borde de la cesta o macetero decorativo.
A continuación, hay que tapar el tiesto de la planta artificial y para ello puedes optar por varias opciones: cantos rodados que cubran todo hasta ver sólo el tronco, musgo o incluso tierra.
En las siguientes imágenes puedes ver un claro ejemplo del trabajo que ha realizado Katrina Chambers y Casey de The DIY Playbook. No me digas que no les ha quedado estupendo.
Utiliza plantas que caigan
Si aun así no te convence el resultado, porque las hojas de las plantas grandes te generan desconfianza, prueba con plantas de hoja más pequeña y con caída.
Suelen ser más flexibles y su movimiento te puede parecer más creíble.
Además, este tipo de plantas artificiales las puedes utilizar con maceteros colgantes, de este modo, al tenerlas más altas, las quitas ligeramente del primer plano.
Y si se encuentran rodeadas de otros objetos, como la estantería de la imagen, su material de acabado pasará más desapercibido y terminarán de convencerte.
Utiliza plantas con hojas de tonos variados
Se trata de imitar la naturaleza, y ésta no es perfecta. Las plantas con distintas tonalidades de verde, con motas y rayas también contribuyen a alcanzar la tan buscada naturalidad.
¿Cómo hacer que unas flores parezcan naturales?
Combina distintas flores
Al igual que en el primer caso de las plantas, con las flores también puedes crear conjuntos variados utilizando maceteros que te ayuden a pasarlas por auténticas.
En el caso de que optes por un gran macetero, necesitarás elevar la base interna. Para ello puedes valerte de unos ladrillos y, sobre ellos, colocarás espuma floral para clavar tus flores artificiales.
El resultado final dependerá de tu imaginación, combinación de colores y maña. Así que sólo hay que practicar y disfrutar de ese ratito de manualidades.
A Rebekah de A Blissful Nest le ha salido esta maravilla para decorar la entrada de una vivienda.
Juega con las texturas y el volumen y añade alguna rama natural
Para un centro floral más sutil, puedes optar por ramas que ya vengan con distintas tonalidades.
Si además le añades alguna ramita natural con hojas verdes (por ejemplo unas hojas de eucalipto o laurel, que duran mucho y secan bien), te ayudarán a minimizar lo artificial y el ojo tenderá a interpretar que todo el conjunto es natural.
No te cortes a la hora de añadir, mientras más frondoso se vea, mucho mejor.
También puedes elegir ramas con distintos tamaños de flor. Si buscas un buen proveedor encontrarás distintos tipos de ramas de una misma variedad.
Juega con las tonalidades, mezcla flores diversas y conseguirás volumen y textura. De este modo parecerá un auténtico ramo de flores naturales.
Un jarrón de cristal con agua
¿Quién pensaría que un jarrón con agua no iba a tener vegetación natural? Un truco sencillo, barato y que consigue el objetivo que buscamos.
Eso sí, sólo funciona con un jarrón transparente, se trata de que se vea el agua.
Automáticamente, quien lo vea, borrará de su mente cualquier posible duda sobre la autenticidad de las flores o ramas (ahí jugamos con el lado psicológico de la percepción humana).
También puedes jugar con el olfato.
Rocía tus ramos de flores artificiales con aromas en spray. Se trata de un truco sutil, pero muy acertado. Somos muchos los que solemos acercarnos a oler las flores, así que con nuestro aroma conseguiremos despistar a más de uno 😉
Y si quieres más inspiración sobre decoración floral, puedes echar un vistazo a nuestro post sobre ideas para decorar con flores donde hablamos largo y tendido sobre ello. Unos trucos que puedes adaptar perfectamente a tus ramos artificiales.
Hasta aquí los trucos para que tus flores y plantas artificiales parezcan naturales. Esperamos que te hayan servido de ayuda y no las descartes para tu decoración.
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