Murales hechos a mano para decorar paredes

Los murales hechos a mano para decorar tanto interiores como exteriores son claramente una tendencia hoy en día dentro de la decoración mural.

Se trata normalmente de grandes pinturas y dibujos que van un paso más allá de las típicas paredes pintadas en un color plano o cubiertas de papel pintado. 

Con estos diseños por un lado conseguimos la máxima originalidad, ya que no es algo habitual de ver, y por otro lograremos unos efectos increíbles para nuestras paredes, tanto si optamos por los diseños más sencillos como los más complejos, con increíbles trampantojos.

Dado que hacerlo tú mismo en este caso es complicado, lo ideal es contratar a alguna empresa de murales decorativos especializada en la realización de murales hechos a mano con motivos de todo tipo (naturaleza, vegetación, realismo, etc.) para que puedas elegir el que más se adecúe a tu estilo y necesidades.

En cualquier caso vamos a exponer un poco las características de este tipo de murales y dónde los podemos colocar para que tengas toda la información.

Tipos de murales 

Murales hechos a mano en paredes exteriores

Pintar un muro exterior puede ser una idea muy atractiva tanto para nuestro local (en caso de tener un negocio) como para nuestra vivienda (en caso de ser unifamiliar o de disponer de algún patio de uso exclusivo).

Este tipo de murales exteriores ofrece muy buenos resultados y le darán un aspecto personalizado y único a nuestro inmueble.

Y es que cuando hablamos de decorar paredes estamos tan acostumbrados a pensar en las interiores (ya sea con pintura, papeles pintados, fotos o cuadros) que rara vez nos paramos a pensar en los muros exteriores, cuando realmente son lo primero que se ve al llegar a la vivienda o local.

Un buen soporte para este tipo de murales son las paredes que dan a nuestro jardín o piscina, ya que de este modo podremos crear ambientes diferentes o transportarnos a zonas tropicales.

Murales hechos a mano en paredes interiores

Los murales decorativos en paredes interiores son una tendencia en crecimiento hoy en día y se contratan cada vez más.

Es cierto que dentro de los locales es mucho más fácil aplicar diseños atrevidos, ya que se busca llamar la atención, pero en tu vivienda puedes atreverte con la entrada, el pasillo, el salón o el dormitorio para darle mucha vida. 

Aunque estamos más acostumbrados a ver paredes con motivos en papel pintado, esta opción nos da un plus de originalidad y nos permite hacerlo totalmente personalizado, ya que podemos ser nosotros los que diseñemos el motivo o demos las indicaciones oportunas. 

Y además, al haberlos para todos los gustos puedes optar por motivos naturales o basados en una gama corta de color en caso de preferir algo menos “grafitero” para la casa.  

Otras superficies

Realmente los murales hechos a mano son una opción muy versátil que se puede aplicar en cualquier tipo de superficie, no sólo en paredes. 

Pueden realizarse sobre una chapa perforada, sobre superficies rugosas, ladrillo, piedra, cierres metálicos, vidrio, yeso, plástico, textiles, verjas metálicas (por ejemplo para entrada de garajes), etc.

Ya dentro de la vivienda, también podemos salirnos de la clásica pared para decorar con ellos techos y suelos, una opción muy interesante y poco utilizada. 

Eso sí, si optamos por el suelo habrá que tener más cuidado, ya que será por donde pisamos y un diseño muy arriesgado nos puede hacer sentir inseguros. 

Motivos

A la hora de elegir tu mural tendrás que tener en cuenta el estilo y las sensaciones que quieras crear, y eso dependerá tanto de la paleta de colores como del tipo de motivo que elijas.

Veamos algunos de ellos para todas las opciones.

Realistas

Los dibujos realistas pretenden representar la realidad de la manera más fiel posible, con sus luces y sombras, sus texturas y sus proporciones correctas. 

Pueden consistir en “escenas completas” como un paisaje o simplemente en motivos y formas concretas que se repiten.

a) Naturaleza

Dentro de los motivos realistas éste es uno de los más habituales. 

Los motivos vegetales y florales son muy demandados, ya que siempre dan sensación de amplitud, libertad y relax. Nos permiten evadirnos del ambiente de la ciudad y darnos “un respiro de aire fresco”. 

b) Escenario

También es bastante habitual, ya que pueden trasladarnos a distintos lugares, desde los más clásicos (una ciudad como París) a una playa del Caribe, pudiendo ser más o menos atrevidos dependiendo de tu propuesta.

c) Diseño propio

Con los murales hechos a mano realmente podemos hacer cualquier tipo de diseño realista. 

Desde un simple rostro a un animal, un objeto, un alimento o una composición de varios elementos que creen una composición interesante. 

Dibujos

En este caso se trata de representar algo que ya exista, como los dibujos animados preferidos de tus hijos o algo diseñado por ti (o por el artista que contrates). 

Son una buena opción para una habitación infantil, un colegio o una guardería, aunque en realidad los hay también para adultos, en este sentido hay infinitas posibilidades e igualmente son válidos para exterior como para interior.

Por otro lado, podemos encargar cualquier dibujo de la clasificación anterior pero con un toque distinto.  Esto hará que deje de ser realista pero cobrando mucha personalidad.

Trampantojos

Los trampantojos son pinturas diseñadas con una perspectiva tal que contempladas desde un determinado punto de vista, hacen creer al espectador que el fondo se proyecta más allá del muro o del techo o que las figuras sobresalen de él. 

El motivo elegido puede ser o no realista, pero es importante que la perspectiva y las sombras estén muy logradas. 

Por ejemplo, podríamos representar a Nemo o a Hulk saliendo de la pared, una calle de Londres que se alarga más allá de nuestro muro o un paisaje que se funde con el real.

Letras

Es lo más parecido al graffiti que vemos por las calles, aunque dentro de este tipo de murales existen muchísimos estilos diferentes.

En el mundo de los murales de letras existen varias categorías como los tagged (con rotulador), las pompas, o el model pastel, pero eso ya se lo dejamos a los profesionales 🙂

Además, en el caso de locales comerciales, podemos darle un toque de carácter al texto informativo en la entrada, como el horario de apertura o representar nuestro logotipo en alguna pared interior. 

Dibujos geométricos

Se pueden usar figuras poligonales de todo tipo, incluyendo las más básicas como triángulos, cuadrados, rombos o estrellas, y llegando hasta las composiciones más complejas.

Lo más común es usar cinta de carrocero para hacer líneas rectas, aunque algunos profesionales son capaces de hacerlo a mano alzada. 

Es cierto que en grandes superficies no se nota tanto el detalle, pero en paredes interiores el acabado será mejor si se hace con una guía.

Diseños abstractos

Claramente en esta categoría entran todo tipo de elementos que nos podamos imaginar. 

Podemos coger inspiración de algunos artistas pioneros en este tipo de dibujos como Kandinsky o Pollock, o ponernos creativos y hacer algo nuevo.

Algo relacionado con esto y que es tendencia a día de hoy son los doodles. Nacen de los dibujos que hacemos en segundo plano cuando estamos prestando atención a otra cosa, pero el concepto ha crecido mucho. 

Se trata de una composición de dibujos abstractos hechos normalmente con rotulador negro en los que las formas se van adaptando unas a otras.

Como ves, una vez conoces todas las opciones posibles para decorar con murales hechos a mano simplemente debes elegir qué se adecúa más para ti.

Y recuerda que si eres fan del hazlo tú mismo, puedes probar con algunas ideas para decorar paredes con una filosofía más DIY. Pero está claro que el resultado no será el mismo que si lo hace un profesional.

Y ahora sabes todo lo que te hace falta, ¡ponte manos a la obra, que el límite es tu imaginación!

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