¡Feliz Año a todos! Empezamos con las pilas cargadas y dedicamos este primer post del año al fallo del Instituto Pantone sobre el color del año 2020: El número 19-4052, o, para el común de los mortales, el Pantone Classic Blue.
Y es que parece que desde Decofilia tuvimos una revelación cuando semanas antes del fallo publicamos este artículo sobre cocinas azules. Se ve que en nuestro subconsciente nos anticipamos a la elección del color del año por parte de este Instituto que año tras año elige el tono que durante el año siguiente será tendencia en todos los ámbitos relacionados con el diseño (gráfico, moda, de interiores…)
Ya sabéis que esta elección no es que haya que tomarla a rajatabla, ya que no siempre funciona del todo en la realidad, o al menos no como color principal o usado a nivel masivo durante el año de su elección, pero sí da una idea de por dónde van los tiros.
El año pasado por ejemplo, podríamos decir que el living coral sí tuvo su aplicación a la realidad, pero ya llevaba de moda un tiempo y su reino no fue más importante que el de otros como los tonos beige, nude o blush, tan adecuados al estilo natural o mediterráneo, o los tonos amarillos, en perfecta combinación con el coral.
El Pantone Classic Blue por su parte es algo más “difícil” como color para su aplicación en diseño interior. Al tener un punto oscuro cercano al añil y un punto clásico, como color resulta muy potente su presencia, por lo que no suele casar mucho con algunos estilos tan en boga hoy en día, como el rustic chic o el escandinavo. Sin embargo, aplicado en pequeñas dosis o combinado con otros puede dar mucho juego.
En cualquier caso, como una imagen vale más que mil palabras, vamos a mostraros algunas aplicaciones de este recién elegido como color del año 2020.
En paredes
En cocinas
Si una cocina completamente azul te resulta demasiado cansina, prueba a colocar este color del año 2020 sólo en la parte inferior y verás cómo se aligera el conjunto, consiguiendo además una cocina muy elegante.
En baños
Así como en la cocina el color azul es menos habitual porque hay muy pocas cosas en la naturaleza que se coman y que tengan ese color, en los baños su presencia es más habitual, pues el azul se asocia con el agua.
A la hora de aplicarlo en esta estancia, lo más habitual es utilizarlo en los azulejos, bien hasta el techo o bien a media altura combinados con otros de tono más claro.
Otra opción menos habitual es llenar el espacio de este color, tanto en paredes como en suelos o mueble lavabo. Esta solución tiende a oscurecer el baño, pero le da un efecto muy particular y diferente, ideal para locales, restaurantes u hoteles donde el impacto es temporal y no de uso diario.
Comedores
La aplicación de este azul tan particular a los comedores puede realizarse de muchas formas.
Lo habitual, dada la potencia del color, es emplear sillas tapizadas en este tono, de forma que se le dé un toque puntual a la decoración. La otra es vestir una pared (ya sea pintada o con molduras) y utilizar pequeños toques del mismo color en alguna otra zona (el estampado de la alfombra, el cojín del asiento, etc.)
Dormitorios
En el dormitorio, su empleo habitual es la zona del cabecero de cama, ya sea en el propio cabecero o en la pared que es encontremos detrás.
Son dormitorios con un ligero punto sobrio y elegante muy del gusto del género masculino.
Para mitigar ese aspecto sobrio o masculino, puede feminizarse con mobiliario clásico, con sus formas orgánicas y sus volutas, o añadirle estampados y maderas.
Salones
En el salón existen múltiples formas de aplicar este color del año 2020, siendo las más habituales las paredes y el sofá principal, al que se le pueden añadir alfombras o complementos en caso de buscar una fuerte presencia de este color.
Piezas de mobiliario
Para mitigar la fuerte presencia de este color en cualquier ambiente al que va aplicado, lo que condiciona su decoración para siempre, podemos utilizar piezas sueltas que le den personalidad al espacio pero que en un determinado momento podamos retirar o sustituir sin que el conjunto se vea perjudicado o tengamos que hacer mucha obra.
Sillones, sillas, bancos o aparadores son candidatos perfectos para este fin.
Estanterías
Merecen capítulo aparte porque el Pantone Classic Blue queda perfecto para estanterías de suelo a techo, ya que además de aportar la elegancia características de los tonos oscuros, la aglomeración de libros y otros objetos hace que el color de ésta se diluya, creando bonitos contrastes.
Locales
También merecen un apartado específico, porque si hay un lugar donde no se debe tener miedo a aplicar el Pantone Classic Blue es en cualquier local, ya que en estos casos lo importante es el impacto y la diferenciación de la competencia, y al ser lugar de paso, el visitante no se va a cansar del color como quizás pudiera sucederle en casa.
Restaurantes y bares de copas suelen ser su hábitat natural, pero también puede utilizarse en combinación con el blanco en pescaderías, marisquerías, tiendas que busquen un estilo mediterráneo o en cualquiera que desee aportar un toque marítimo o evocar la presencia del mar.
¿Y con qué combina?
Hasta ahora hemos visto la presencia del Classic Blue en su versión monocolor, pero si deseas combinar este tono para aligerarlo, además por supuesto de optar por el color blanco, lo ideal si buscan un ambiente neutro es combinarlo con maderas claras (roble o fresno por ejemplo), gris perla o platas (tonos claros que hacen contraste con el color), tonos beige o visón claro (que le dan un aire muy elegante) y dorados (ya que el amarillo es su color complementario).
Si en cambio buscas un ambiente más colorido, este color queda precioso con el rosa palo, el coral, y para los más atrevidos, el amarillo.
En fin, como véis, múltiples opciones para valorar el Pantone Classic Blue como color del año 2020. Os dejamos con otras imágenes… ¡y que disfrutéis de él hasta el año que viene!
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Vía: pinterest.com