Hoy nos adentramos en el mundo de las alfombras con ribete, un detalle muy significativo y al que no solemos dar importancia, que sin embargo determina el estilo de cada tipo de alfombra y de la estancia donde las empleamos.
Existen diversos tipos de remates de alfombras, algunos de carácter más formal y otros más informales. Los más pulcros y marcados encajan bien tanto en estilos clásicos como contemporáneos, donde se presta mucha importancia a los acabados y al detalle. Sin embargo, las alfombra remates menos definidos encajarán mejor en estilos espontáneos y naturales como el rústico o el boho chic.
Para hacernos una idea de los tipos de ribetes de alfombras existentes en el mercado, vamos a ver un poco más a fondo cada uno de ellos.
Ribete de Cenefa
El ribete de cenefa es un clásico de los espacios con carácter. Consiste en definir el contorno de la alfombra con una cinta de 3-4cm de ancho en distintos materiales, aportando un acabado marcado y elegante.
Se suele emplear tanto en el mismo tono de la alfombra como en su opuesto, para crear un contraste entre la superficie de ésta y su perímetro.
Es frecuente verlo en alfombras de sisal, combinadas con ribetes en cuero, ante, textil y otros materiales naturales.
Ribete fino
Al igual que el ribete de cenefa, el ribete fino sigue la misma técnica de cosido superpuesto al perímetro de la alfombra, aunque afinando en grosor.
Ofrece un acabado más discreto y suele emplearse en tonos similares a los de la alfombra para mimetizarse con ella.
Es un tipo de ribete muy característico de las alfombras sintéticas y suele realizarse en hilos de nylon, entre otras variedades similares.
Ribete entretejido
El ribete entretejido muestra un aspecto artesanal, ya que se caracteriza por ser un remate muy sencillo llevado a cabo entre los puntos extremos de cada hilada de la alfombra, que hace que perciba la alfombra como un continuo, y suele servir para que ésta no se deshilache con el tiempo.
Este tipo de ribete procede de las técnicas de tejido más primitivas. Es muy reconocible en las alfombras de fibras naturales creadas a partir de materiales autóctonos como el esparto o el ratán, tan originales como su propia técnica de creación.
Ribete de festón de hilo
Consiste en rematar la alfombra con una hilada muy fina y densa rodeando todo el perímetro con un pespunte de la misma tonalidad que la alfombra.
De este modo se consigue un remate perfecto y resistente que podemos ver con frecuencia en alfombras de tejido artesanal como son las características alfombras de estilo persas.
Ribete de cinta pegada al dorso
También conocido como ribete oculto, se emplea en alfombras de pelo largo y corte contemporáneo para rematar sus extremos al corte, es decir, sin definirlo visualmente (de esta forma el pelo se siente y percibe también en el perímetro de la alfombra).
La técnica consiste en fijar, por el dorso de la alfombra, una cinta adhesiva al ras del perímetro protegiendo parcialmente del deshilachado. Estas alfombras son más sensibles al roce y a los tropiezos en comparación a otras pero ofrecen un aspecto más singular.
Ribete con remate de flecos
La clásica alfombra de flecos que todos conocemos. Un remate muy sencillo y tradicional también donde las hiladas finales se rematan en un nudo dejando el fleco restante suelto.
Este tipo de remate se ve en alfombras de estilos muy variados, pero sin duda es especialmente conocido entre las típicas alfombras turcas de estilo árabe.
Con estos tips podrás diferenciar mejor los tipos de ribete para alfombras que nos ofrece el mercado y elegir de forma más sencilla el que se adapte más a tu estilo decorativo.
Y sin más, te dejamos con algunos ejemplos más para tu inspiración 😉
Vía: pinterest.com