La decoración de paredes es uno de los quebraderos de cabeza más habituales a la hora de vestir la casa, así que hoy dedicamos el post a uno de los modos más sencillos, económicos, estéticos y últimamente más de moda para hacerlo: el diseño lineal.
Cuando uno se encuentra una pared desnuda se hace casi irresistible no querer colgar algo en ellas para dar un sentido, un protagonismo y ese toque que a primera vista te hace decir ¡wow! tanto a ti y a tus invitados.
Aunque en este mismo blog ya hemos tocado distintas formas de hacerlo (con sombreros, con pintura, con papel pintado…), lo habitual suele ser colgar uno o varios cuadros, y en ese sentido el diseño lineal resulta perfecto, pues en su forma más sencilla suele venir en formato lámina (aunque no sólo como verás en este post).
Por si no has oído hablar de él, aquí te contamos en qué consiste, cómo puedes usarlo y algunos tips de decoración e interiorismo que te harán integrar este arte minimalista y sencillo en tu hogar.
El diseño lineal parte de la idea del “menos es más” de Mies Van der Rohe, que trata optar por elementos decorativos ligeros que no sobrecarguen el ambiente.
Muy característico del estilo nórdico, el diseño lineal imita la forma humana a través de trazos o líneas no terminadas.
Sus figuras pueden ser de cuerpo entero o de sólo una parte (fundamentalmente el rostro) y tiene a las obras de Pablo Picasso como máxima fuente de inspiración.
La atmósfera que produce invita a la calma y al descanso tan típicos de la corriente minimalista.
¿Quieres ver ideas para decorar paredes con este tipo de arte? ¡Pues vamos allá!
Láminas agrupadas
Puedes optar por componer varias láminas de forma ordenada y alineada, o colocarlos de forma más alocada, la decisión está en ti.
Pintura protagonista
Si eres de naturaleza atrevida te mostramos otra increíble forma de cautivar a cada persona que pise tu hogar con el diseño lineal.
En este caso se trata de usar las paredes como lienzo, convirtiendo el diseño lineal en arte. El muro es el protagonista de tu espacio interior, así que si te atreves, basta un poco de pintura y brocha en mano para dar estilo y autenticidad a ese espacio que espera ser renovado.
Además, de esta forma evitas tener que encuadrar láminas o tratar de decorar el espacio con muchos otros complementos, ya que éste habla por todos los demás.
Decomurales y papeles pintados
Llenar toda una pared de múltiples diseños lineales es otra forma impactante de decorar un espacio.
Esto suele hacerse con papeles pintados que transforman y eliminan cualquier atisbo de aburrimiento en tu cocina, baño, dormitorio o cualquier espacio de tu casa.
Ideal para aquellos que desean transformar un hogar sin vida en uno atrevido, dinámico y lleno de movimiento.
Eso sí, al llevar mucho dibujo hay que tener cuidado a la hora de instalarlo, para que toda línea encaje a la perfección.
Este tipo de papeles, además de llamativos, dan mucha personalidad al ambiente.
Quedan bien en cualquier espacio, desde una sala de estar hasta un baño, aunque en este último caso el papel deberá tener una composición especial para resistir el vapor de agua y que no se levante.
El papel pintado permite resaltar un espacio y dado que su función es acentuar una pared vista desde varios ángulos, no debe colocarse en todas ellas sino sólo en un punto focal (la pared de un comedor, un cabecero…)
Además de personalidad, este tipo de murales aportan luminosidad y profundidad en el espacio, especialmente cuando la línea viene marcada en grises claros.
Si creías que la repetición de un patrón o los estampados saturados de información se verían mal, aquí tienes ejemplos para inspirarte y romper ese temor.
¿Eres amante del color? ¡Espera, que también hay opciones para ti! Si los blancos y grises no van contigo, también existen opciones para variar y agregar color.
Puedes optar por añadir color en el fondo de base (dejando el blanco para la línea) u optar por manchas sueltas de color sobre las cuales colocar el diseño.
Rincones especiales
En ocasiones tenemos en casa espacios, paredes o rincones sin un uso concreto, algo abandonados y que pueden resultar aburridos por la falta de ese toque especial.
Peeeero…si eres de esas personas que se preocupa hasta en el mínimo detalle y a cada rincón le das sentido, usa el diseño lineal y verás cómo se transforma 🙂
A veces los rincones quedan en el olvido por la falta de complementos decorativos o porque nos centramos en las áreas principales de la casa, pero una manera sencilla y económica de darles vida es complementar el espacio con un cuadro de diseño lineal.
Aquí te dejamos ejemplos que te harán revivir esos pequeños rincones sin uso. Ese pequeño cambio hará que este comience a ser tu espacio favorito.
Galerías
Los muros galería basados en el diseño lineal resultan muy decorativos y permiten dar la sensación de amplitud y altura dependiendo del orden y sentido en el que se coloquen las láminas.
Éstas pueden ir colgadas en el muro o bien apoyadas en baldas continuas o directamente sobre el suelo.
Pero además de estas características también te permitirán crear un espacio ordenado, organizado y casi igual a una galería de arte.
Bonus
Si te atrae el diseño lineal, ¿te atreverías a traspasarlo a un objeto?
Este tipo de arte no se centra sólo en las paredes, sino que puedes llevarlo a objetos decorativos y diseñar con ellos cualquier accesorio: aparadores, cojines, jarrones, maceteros… ¡hasta bañeras!
Aquí te dejamos algunas ideas para que te inspires y te atrevas a dar un paso más a lo desconocido y único. ¡La creatividad al poder!
Como ves, son miles las posibilidades que te ofrece el arte lineal para generar cambios radicales y únicos en tu hogar.
Así que desde Decofilia te animamos a utilizarlo ahora que está de moda. ¡Verás como el resultado será impactante!
Y si quieres aprenderlo todo sobre decoración, echa un vistazo a nuestros cursos online pinchando aquí.
Vía: pinterest.com
Excelente artículo, muy interesante la información y un gusto impecable. Gracias por compartirlo, saludos
Muchas gracias a ti Beatriz por tus palabras 🙂