El bronce como material (aleación metálica de cobre y estaño) es muy conocido por todos, pero en el mundo del interiorismo y la decoración siempre ha sido como el hermano pobre, dejando el protagonismo permanente a la plata o el oro… Sin embargo, parece que en los últimos tiempos vuelve a tomar fuerza, ya que sus posibilidades en diseño de interiores son muchísimas: con él se consiguen unos resultados decorativos muy originales, bonitos y elegantes.
Decorar con bronce tiene la ventaja de que se puede aplicar tanto en interiores como en exteriores, en mobiliario, paredes, techos, suelos, etc. Es un material que se adapta muy bien a muchos ambientes y estilos, como el industrial, el estilo escandinavo y por su puesto el estilo rústico que siempre fue la horma del zapato para el empleo de este material, especialmente en la decoración de cocinas (cazuelas, sartenes, etc.).
Otra ventaja de este material es su fácil maleabilidad. Esto lo convierte en muy versátil para realizar diseños de interior, desde un revestimiento para un paño de pared, hasta una ducha, un techo, etc. Cualquier cosa es susceptible de diseñarse con bronce, ya sean barandillas de escaleras, estructuras de camas o mobiliario.
Si a la hora de decorar con bronce te planteas con qué colores puede combinar, este material va muy bien con los tonos neutros como el blanco, el negro, los grises, con colores pasteles, tonos tierra y con los llamativos… En general suele ir bastante bien con la mayoría de la gama cromática, así como con la madera en casi todas sus vertientes. No obstante, si queremos que el material resalte, siempre será mejor elegirla de un tono con el que contraste más; si en cambio preferimos que se integre en la decoración, mejor optar por colores similares a los del material.
Si estás pensando en un mueble entero de bronce, realmente no hace falta. Con un solo detalle, la pieza en la que vaya ya llamará la atención de manera elegante. Por ejemplo, puedes colocarle unas patas de bronce a una mesa de madera (lacada o natural) o bien elegir la superficie de bronce y colocar las patas en otro material. Si quieres dar un toque elegante a tu casa puedes hacerlo con pequeños detalles cómo las lámparas colgantes (especialmente conocidas son las del diseñador Tom Dixon), lámparas auxiliares, el marco de un cuadro o un espejo, candelabros, etc.… Cualquier objeto es bueno si se sabe utilizar este material.
Además del mobiliario, también se pueden diseñar interiores de estancias enteras con bronce, como baños, cocinas, exteriores, etc. Lo más frecuente es utilizar algún panel para revestir paredes o puertas en cocinas o baños. Otra opción es elegir toda la fontanería de cobre e instalarla por fuera, decorando con ellas las paredes del baño. De hecho, si te atreves, puedes hacer lo mismo en el resto de la vivienda con las tuberías de la calefacción: le darás un toque industrial y divertido (aunque seguramente no todo el mundo lo entienda ;-). Recuerda que con las tuberías se pueden hacer muchos diseños, así que ¡ya sabes! Da rienda suelta a la imaginación y haz con ellas maravillas:).
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Vía: pinterest.com