Si eres amante de las manualidades, del DIY, de la costura y especialmente del patchwork (trabajo de remiendo), estás de suerte, porque hoy traemos un artículo dedicado a esta técnica aplicada a la decoración y el interiorismo.
Por si alguien no conoce el patchwork, se trata de una técnica que cose retales de diferentes telas, colores y estampados. Lo más usual es que se hagan mantas, paños, manteles, cojines, tapices, etc., pero con el tiempo, también se ha ido introduciendo en la decoración de casas. Ahora tenemos la posibilidad de utilizar este arte en el tapizado de nuestros asientos y en las alfombras, aunque también es verdad que en nuestro país todavía no está muy introducido en este aspecto.
Hay proveedores que se encargan de vender el asiento con este tapizado y utilizan para ello telas de todos los colores. Con frecuencia se ven gamas cromáticas de tonos muy vivos, ideales para una decoración pop o kitsch, o bien de tonos más apagados (neutros, arenas o tierras) para estilos más sosegados. Incluso se llegan a ver sillones de diseño como el modelo Egg de Arne Jacobsen, tapizados a todo color y en múltiples versiones.
Lo bueno de este arte es que, si eres manitas, tienes tiempo y te gusta decorar con este estilo, dispones de un abanico de posibilidades a la hora de elegir las telas.
Según las escojas, el salón o la estancia en la que pretendas introducir el patchwork transmitirá unas sensaciones u otras: No sólo tiene que acercarse al pop; si por ejemplo tapizas un sillón barroco con retales de colores morados el resultado será más elegante, si por el contrario utilizas telas de estampados geométricos lo más seguro es que obtengas un estilo cercano al retro.
Como veis, tenemos la posibilidad de conseguir distintos resultados con la técnica patchwork, así que solo queda tener imaginación y un poco de habilidad para tapizar sillones como los que os mostramos a continuación.
Si te gusta la decoración no dudes en seguir aprendiendo más. Ponemos a tu disposición nuestra Decolanzadera, donde encontrarás una gran variedad de cursos de diseño de interiores por poquito menos de lo que te cuesta una cena.
Vía: pinterest.com
Personalmente no soy una fan del patchwork pero me han resultado graciosos y decorativos algunos de los cojines que mostráis. Mi sofá es de negro de piel y le darían vida y alegría al salón.
Gracias por vuestras ideas.
El estilo pop es difícil que cale en general por exceso de color, pero la opción que planteas es ideal. Si en sillones o sofás resulta excesivo, en cojines quedan estupendos, ¡especialmente como comentas sobre un sofá negro!