Ideas para decorar con estanterías colgantes

Construir una vida implica en cierto modo ir acaparando multitud de recuerdos materiales (libros, álbumes de fotos, souvernirs de nuestros viajes…) Por eso, en nuestras casas solemos contar con mucho mueble de almacenaje, ya que a medida que avanzan los años vamos acumulando un número cada vez mayor de estas pequeñas cositas.

Aunque hay que tener cuidado de no convertir la casa en un bazar, el dejar estos detalles a la vista en nuestras estanterías puede pasar de ser un simple ejercicio de funcionalidad a aportar el toque decorativo a nuestra vivienda.

Tanto las estanterías modernas como las de toda la vida están bien para estos casos, pero si queremos conseguir un espacio más delicado o aligerar el ambiente, las estanterías colgantes son una opción muy funcional además de tremendamente decorativa. Cuerdas, cuero y metal son los materiales principales empleados para la sujeción de los estantes. Veamos algunos ejemplos que te permitirán coger ideas para hacerte tu propia estantería y convertirla en un objeto de lo más original.

Estanterías colgantes de cuerda

La cuerda es uno de los materiales más habituales en este tipo de estanterías. Su aspecto fino y delicado le aporta un aire casi etéreo a la estructura, a la cual se le pueden añadir pequeños adornos. Además, tiene la cualidad de darle un punto rústico y casero muy del estilo DIY en línea con las tendencias de hoy en día.

Habitaciones infantiles

Para colocar los muñecos o peluches de los más peques y otros pequeños adornos infantiles, las estanterías colgantes elaboradas con cuerdas aportarán un toque muy circense a la habitación con este sistema de balda a modo de columpio.

Plantas

También la colocación de plantas en suspensión, ya sea en pared o en ventana, puede llevarse a cabo mediante este tipo de estanterías. La ventaja es que permiten colocarlas ordenadamente, sin obstaculizar demasiado las vistas en ventanas fijas, y en el caso de las paredes ofrecen un toque decorativo lleno de frescura evitando salpicarlas con diferentes maceteros fijos, pudiendo además retirarlos todos de una vez sin dejar apenas daños.

Estanterías colgantes de cuero

El cuero, muy utilizado en decoración, es otra de las principales alternativas de suspensión en las estanterías colgantes. Las baldas se deslizan en el interior de la cinta de cuero, sistema que aporta una mayor estabilidad ante movimientos, ya que la estructura se refuerza respecto a las que se componen de tiras de cuerda. Funcionan estupendamente en todo tipo de estancias, desde habitaciones o baños a cocinas y despachos.

Si lo que deseas es conseguir un aspecto más rudo, puedes optar por cintas de cuero oscuro de estilo Folk, Bohemio y Rústico; si en cambio te va el estilo escandinavo opta por correas claras que le darán a tu estantería un aspecto muy danés.

Estanterías colgantes de metal

El alambre es el tercer sistema para conseguir estanterías colgantes ligeras y etéreas. Este material es ideal para darle un aspecto más moderno y minimalista a tus estanterías, ya que su rectitud de líneas y su acabado metálico lo hacen perfecto para la decoración contemporánea.

¿Te apuntas?

Ya elijamos una opción más delicada o una más ruda, las estanterías colgantes ofrecen sin duda un plus en lo que a decoración se refiere. Te mostramos más ideas inspiradoras para decorar con ellas para que tus paredes marquen la diferencia.