Si el último tono analizado en psicología de color fue el blanco, hoy analizaremos el color negro como tonalidad base en decoración de interiores.
El color negro, junto con el blanco y el gris, es uno de los tres tonos considerados como neutros (ni fríos ni cálidos) y por tanto puede combinar con cualquier color de la gama tonal.
Si el blanco es la suma de todos los colores luz (RGB), el negro es la suma de todos los colores pigmento (pintados) y puede considerarse como “la ausencia de luz”, el color más oscuro de toda la gama.
Como cualidades positivas, el color negro resulta uno de los tonos más elegantes, sofisticados y sobrios. Tiende a estilizar y su empleo en cualquier ambiente siempre aporta un toque chic. Siendo el color preferido históricamente por nobles y reyes, la decoración en negro agrega carácter y simboliza en cierto modo el lujo, la prestancia, el prestigio y la exclusividad. Y es que un objeto en negro siempre se percibirá como de más calidad que cualquier otro color aún siendo el mismo modelo o teniendo las mismas características.
Sin embargo, como cualidades negativas, el negro se asocia a la muerte, al dolor y a la tristeza, al duelo, a la soledad (es el color de la viudedad) y a la desesperanza, por lo que su empleo no debe dominar la estancia, sugiriéndose en pequeños toques de decoración. Y es que así como en el blanco hay matices (más ocres, más fríos), en el negro no hay medias tintas: cualquier matiz en este tono tenderá a convertirse en gris.
El negro es además el color que más absorbe la luz y por tanto debería evitarse en interiores que no cuenten con mucha luz natural. Tampoco se recomienda en habitaciones infantiles o en personas inseguras o con tendencia a la depresión. Es en cambio adecuado para interiores masculinos o para personas con mucha seguridad y personalidad.
Tip para decorar: En general, un toque de color negro siempre aportará sofisticación, pero dado su carácter absorbente, te recomendamos emplearlo con moderación (marcos, lámparas, algún sillón, cojines o jarrones) o bien no utilizarlo de forma monocromática sino mezclarlo con algún otro color (amarillos, turquesas o fucsias). Destaca particularmente en combinación con blanco y maderas claras y puede quedar estupendo como tono de pintura en el techo, especialmente cuando éste tiene gran altura.
Vía: pinterest.com
muy bueno
Muchas gracias por compartir este artículo sobre el color negro. Un contenido muy interesante y digno de leer. Un saludo
Gracias a ti por el comentario 🙂
Hola buenas tardes mi casa es todo blanco la puerta corredera del salón a Cosina quería poner color negro quedaría bonito???
Hola Knarik,
¿La puerta lleva cristalera? Si es así el negro quedará muy bonito, si es opaca igual es una masa algo grande. No obstante, puedes ponerla sin problema, pero en ese caso te recomendaría que pusieras algo negro (puntual) en algún otro sitio del salón. Por ejemplo, los marcos de una láminas grandes, la montura y cable de las lámparas de comedor, las patas de sofá o sillas de comedor, algún pequeño objeto decorativo o mesita auxiliar…
De esta forma quedará compensado y el contraste no se centrará sólo en la puerta.
Además, el negro le da un toque muy elegante a cualquier estancia donde lo pongas (siempre que no la llenes de ese color, porque absorbe mucho la luz y empequeñece espacios). Eso sí, es ideal para estilos contemporáneos y nórdicos, más que para otro tipo de estilos como el shabby chic, boho, etc. por lo que habría que analizar también el estilo que le quieres dar a la casa.
¡Espero haberte ayudado!
Eva Ruiz
Decofilia.com
Hola yo vivo en una habitación con mis niños y estoy decorando con tonalidades turquesa y negro .mi living que color me recomienda como los sillones ,mesa de centro y alfombra?
Hola Isis,
No me queda claro si el espacio en el que vives con tus niños es todo uno o son estancias separadas.
Si el espacio es uno solo, como el turquesa es un color vivo y potente, lo suyo sería ir a tonos muy neutros en el resto (sillones o sofá, alfombra, cortinas, etc.), por ejemplo blancos, beiges, etc. y combinar con cojines que mezclen blancos y azules claros (o mentas o lilas, tonos que van muy bien con el turquesa) con alguno turquesa en sí (sólo uno, el resto suaves).
La mesa de centro (y las mesas en general) pueden ir en madera para darle calidez (la madera siempre casa con todo).
Un saludo y esperamos que te sirva.